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Luego de marchas y contramarchas sobre la apertura de los campings en la provincia de Buenos Aires, el ministro de Producción, Ciencia e Innovación Tecnológica de la provincia de Buenos Aires, Augusto Costa, finalmente confirmó su reapertura en diferentes municipios de la provincia a partir del 1° de diciembre.
Ya en tiempo de descuento hacia el inicio de la temporada estival, se presentaron los protocolos de la provincia de Buenos Aires para el uso de campings, que consigna un aforo del 50%, permitiendo el acampe parcela de por medio. En el caso de las mesas, piletas de lavado y parrillas o fogones se podrán utilizar respetando la distancia social mínima de 2 metros entre personas que no pertenezcan al mismo grupo conviviente. El uso de baños y vestuarios estará determinado por un sistema de turnos para evitar aglomeraciones. Los espacios de juegos y canchas deportivas no estarán habilitados. Con respecto a las duchas, el protocolo establece que se habilitarán dejando una vacía de por medio para respetar la distancia social. El tiempo de ducha deber ser de 7 minutos y consigna que es necesario bajar la temperatura del agua para reducir la cantidad de vapor en el ambiente. No se permite el uso de vestuarios, ni el uso de las duchas como vestuarios. Los usuarios deberán cambiarse en carpas u otras zonas que no sean espacios comunes. Se podrán usar las piscinas con aforo máximo.
«Podemos abrir a partir del 1° de diciembre. Tenemos protocolos aprobados, que habíamos presentado en agosto a los ministerios de Turismo y Salud de la nación y habían sido aprobados por la Cámara Argentina de Turismo. Después nos sorprendió los dichos de Kicillof, cuando dijo que no íbamos a abrir y a partir de ahí empezamos a hablar con gente de la provincia, tuvimos tres reuniones vía Zoom y pudimos llegar a un acuerdo. Presentamos un protocolo a partir del trabajo que se hizo en los campings de España, Francia, Estados Unidos y Canadá y se trabajó fundamentalmente sobre el achicamiento del aforo, el distanciamiento social y distanciamiento natural, es decir, la separación entre parcela y parcela, dejando una de por medio. El modelo es la burbuja familiar, cada burbuja es una parcela», señala Cali Pilaftsidis, propietario del camping El Griego (elgriego.com.ar), de Mar del Plata, que está en la zona Sur a 15 cuadras de la playa y comprende un predio de 10 hectáreas divididas en 800 parcelas que se integran a un parque acuático y un parque aéreo incluidos en la estadía. También hay bungalows y cabañas en alquiler.
Entre otras medidas incorporaron una solapa Covid en la web para hacer las reservas; un pre check in y pago online; la toma de temperatura a todos sus visitantes y un formulario de salud a completarse antes del ingreso.

«El punto más importante es el de las duchas. En ese caso se achicó el aforo y la duración de las mismas a un máximo de diez minutos por persona. Después no hay mayores inconvenientes, ya que nuestro complejo es muy grande, al aire libre, en contacto con la naturaleza. Ese es un poco el protocolo aprobado por la provincia», indica Pilaftsidis.
Consultado sobre las expectativas para el verano, el propietario de El Griego sostiene que la confirmación de la apertura el 1° de diciembre les dio muchísima más previsibilidad y confianza de los clientes, cuando hasta septiembre y octubre, meses en que habitualmente comienzan a hacerse las reservas, aún no sabían si iban a tener temporada. «El lanzamiento de Previaje empezó a ayudar bastante y al definir los protocolos tuvimos muchísimas reservas. Por supuesto que no podemos compararla con el año anterior, porque había sido muy bueno, pero se empieza a mover un poco», concluye.

Duchas al aire libre y otros cambios
«Estamos tomando reservas para diciembre con una estadía mínima de dos días y para enero de cuatro días; para bungalows y alojamiento estamos dejando un día libre entre reserva y reserva, para sanitizarlo y que se ventile antes de que ingrese la nueva familia», explica por su parte Pablo Domínguez, propietario del Camping Estancia El Carmen, de Santa Teresita, uno de los más tradicionales de la costa que ocupa un predio de 14 hectáreas dividido en 650 parcelas..
Inaugurado en 1973, es uno los campings más grandes de la costa, con sector de recreación, lavadero, supermercado y restaurante que seguirán los mismos protocolos vigentes para Santa Teresita; cinco quinchos cerrados para 120 personas que reducirán su aforo a 40 personas con distanciamiento de dos metros entre las mesas y servicio de video cable en las parcelas. «Es un camping familiar, de parcelas amplias, completamente cercado; cada parcela tiene toma corriente, una mesa con bancos y un fogón con parrilla», señala Domínguez.
También cuenta con 27 bungalows con baño privado, y otros 40 bungalows sin baño privado, una pileta climatizada donde antes se realizaban las clases de acuagym, actividad que trasladarán al mar; un equipo de recreación para adultos y para chicos y shows todas las noches que llevarán adelante de forma restringida, con todos los cuidados y el distanciamiento social. También un salón para 400 personas que verá restringida su capacidad a 200, aunque en la medida que el tiempo acompañe intentarán realizar todas las actividades al aire libre.

«El problema mayor que se ve en los campings es el tema de las duchas, entonces vamos a restringir el ingreso, se habilitará una ducha de por medio y habrá una persona en la puerta controlando la circulación. Además, vamos a limitar el tiempo de ducha a diez minutos, y la gente va a tener que cambiarse en su carpa, su motor home o a su bungalow, pero no en los vestuarios, para acelerar el proceso. Además estamos preparando doce duchas al aire libre con cabinas sin techo para que tengas privacidad. En las duchas a la salida de la playa vamos a poner un termotanque para que la gente opte por ducharse fuera de los horarios centrales cuando vuelve de la playa», detalla Domínguez.
Reducción de aforo
«La próxima temporada es una incertidumbre enorme. Comparativamente con cualquier otro año, a este momento estábamos entre las 200 y 400 reservas y hoy tenemos 10. Tuve la oportunidad de reunirme con funcionarios de la provincia desde que se anunció que los campings iban a estar prohibidos, para demostrarles que en todo el mundo, ante la pandemia, la forma de alojamiento más segura habían sido los campings, por tener el 90 por ciento de su actividad al aire libre. También les explicamos que los campings habían cambiado, ahora enemos bidet, cloacas, gas natural, vestuarios de primer nivel, secador manual para las manos», señala Rafael Mugica, uno de los propietarios del camping Miguel Lillo, en Necochea, que ofrece 500 parcelas y cuenta con supermercado, restaurante, quinchos semi cubiertos; plaza de juegos, colonia de vacaciones y una piscina, entre otros.
Consultado sobre los protocolos, asegura que cerraron con Provincia un aforo del 50 por ciento, uso de barbijo obligatorio y ocupación de parcela de por medio, salvo que sea una burbuja familiar. Los vestuarios también reducirán su aforo al 50 por ciento, con distanciamiento ducha de por medio, y un tiempo máximo de 10 minutos. «Después va a sonar una chicharra o un silbato y la persona va a tener que regresar para cambiarse en su carpa, su casilla o motor home, pero no va a poder utilizarse como vestuario», señala.

Antes de ingresar a las duchas también habrá que pasar por una bandeja sanitizante, colocarse alcohol en gel y hacer una fila con distanciamiento social. «Se nos pidió que el agua no estuviera hirviendo, sino tibia, para que no se genere vapor, que saquemos los bancos, las perchas, cualquier zona de contacto. Habrá una persona encargada de controlar la circulación», detalla Mugica.
Y añade: «Respecto de los espacios comunes no quieren habilitar ninguno, así que todo lo que brindamos como servicio adicional adentro del camping no va a estar habilitado, como pileta, plazas de juego, quinchos, colonia de vacaciones».
«Somos un complejo turístico que más allá de la tradicional carpa, casilla o motorhome, tenemos cabañas, bungalows, dormís y hostel. Respecto de las tarifas hemos publicado con un aumento de entre el 25 y 30 por ciento y tratamos de aumentar la carpa lo menos posible, pensando también en la necesidad que va a tener nuestro cliente de salir. Ya se sabe que esta va a ser una temporada atípica por los protocolos, pero también por la cantidad de gente», sigue Mugica (campinglillo.com.ar/tarifas/).
Córdoba ya definió los protocolos
A su vez, en la provincia de Córdoba ya fue aprobado el protocolo Covid-19 para campings elaborado por el Ministerio de Turismo y Deportes de la Nación, en conjunto con la Cámara Argentina de Turismo, el Instituto de Calidad Turística Argentina, y a través del Consejo Federal de Turismo, que siguen las recomendaciones del Ministerio de Salud, donde se siguen los lineamientos generales de distanciamiento social y de higiene, desinfección de superficies y ventilación de ambientes, medidas para la detección y manejo de casos sospechosos y contactos estrechos; capacitación y organización del personal del camping; planificación del servicio, circulación, atención al cliente, gestión de reservas; ingreso de los visitantes, proveedores; uso de sanitarios, vestuarios y duchas; piscinas, sectores de recreación, servicios gastronómicos, seguridad e higiene en general.
Tarifas para el verano
Acampar en El Griego costará desde 800 pesos por persona por día (incluye parque acuático) en carpa, casa rodante, tráiler o motor home, y los bungalows y cabañas desde 4800 pesos para cuatro personas o desde 6000 pesos las cinco personas, con baño privado.
Estancia El Carmen. La parcela para armar hasta 2 carpas, con lugar para el vehículo, mesa con bancos, luz y parrilla, cuesta 1360 pesos para 2 personas por día; para 4 personas el valor es de 2080 pesos (10 por ciento de descuento por abonar 10 días al ingresar y un descuento mayor por estadías más largas). Los precios de los bungalows y cabañas arrancan en 3400 pesos por día para 4 personas sin baño y 6200 pesos con baño, con variaciones según las comodidades y los mismos descuentos que para las parcelas.
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